Hoy en día el tratamiento con bótox es de los más utilizados, resulta sencillo y sin complicaciones. La toxina botulínica es una proteína natural purificada, que relaja los músculos faciales, consiguiendo la mejoría en las arrugas. Se inyecta en pequeñísimas dosis, donde existen arrugas de expresión, con dos fines:
- eliminar y/o atenuar las arrugas.
- prevenir la formación de futuras arrugas.
Este tratamiento no invasivo de rejuvenecimiento facial, es muy eficaz, seguro y cómodo para los pacientes que desean eliminar surcos y/o arrugas que han aparecido en determinadas zonas, por las contracciones faciales en su rostro:
- zona de la frente,
- el entrecejo,
- el contorno ocular,
- el perímetro de la boca y
- el cuello.
La toxina botulínica no es un material de relleno, no elimina las arrugas mediante aporte de volumen, sino que actúa sobre los músculos de la cara relajándolos y disminuyendo el impacto que las contracciones tienen en la piel, devolviendo tersura y luminosidad al rostro, manteniendo una expresión facial natural.
La infiltración de toxina botulínica, es un tratamiento seguro, probado en estudios médicos, que en EEUU se utiliza desde hace casi 20 años con resultados excepcionales, lo que certifica que se trata de una terapia segura, eficaz, bien tolerada.
Se administran en dosis muy pequeñas y no tiene carácter acumulativo con los años. Los efectos son siempre temporales y reversibles, siempre que se respeten las dosis y zonas de inyección. De ahí la importancia de que el tratamiento sea realizado por médicos especialistas, que conozcan la estructura muscular y nerviosa de las zonas donde ha de aplicarse, y las dosis adecuadas para cada tipo de arruga.
TRATAMIENTO
El tratamiento se realiza en Consulta, de forma ambulatoria, se aplica mediante microinyecciones en el músculo, con una aguja muy fina, prácticamente indolora, que solo requiere la aplicación de una crema anestésica en la zona de trabajo.
Una vez que la anestesia tópica ha hecho efecto, se procede a marcar y delimitar las partes que se van a tratar. Después el profesional calcula las dosis de toxina necesarias para la relajación muscular (se mide en unidades)
La aplicación del tratamiento difiere en función de la zona:
- Para el entrecejo se actúa sobre el músculo frontal y se inyecta la toxina en pequeñas dosis a cada lado de la arruga.
- Para difuminar las arrugas que envejecen la mirada se actúa sobre tres puntos:
- En el entrecejo se aplica en los músculos responsables de fruncir esta zona.
- En las temidas “patas de gallo” se realiza un marcaje en forma de triángulo, no inyectando la toxina por dentro del borde orbitario.
- Debajo de la cola de la ceja, para evitar que la contracción del músculo deprima la cola de la ceja.
- Para el “código de barras” (contorno de la boca), eliminamos las arrugas verticales, realizando un marcaje de las arrugas, e inyectando en cada una de las zonas del hemilabio superior la misma dosis.
- Para la comisura del labio inferior (boca triste) se inyecta en la depresión comisural.
- Para el cuello, que presenta en ocasiones arrugas (dos bandas a consecuencia de la contracción muscular (platisma) se aplican 4 ó 5 inyecciones a lo largo de la banda.
INDICACIONES:
- Una vez finalizado el tratamiento se puede volver a la actividad normal inmediatamente
- Se desaconseja acostarse y hacer ejercicio durante las siguientes cuatro horas.
- Puede aparecer algún pequeño hematoma, fácilmente camuflable con maquillaje, que desaparece en pocos días.
- Los efectos se empiezan a observar normalmente a partir del tercer día y, de forma progresiva, van aumentando y borrando las arrugas poco a poco.
- El rejuvenecimiento es evidente y la expresión facial queda más relajada, dando una sensación de tener buena cara y un aspecto descansado.
- El tratamiento debe evitarse en pacientes embarazadas, en la lactancia y en pacientes con coagulopatias o en tratamientos anticoagulantes.
- Para mantener las arrugas difuminadas y prevenir que aparezcan otras nuevas, se recomienda realizar un tratamiento cada cuatro meses el primer año y a partir del segundo año una aplicación cada seis meses. Cando desaparece el efecto de la toxina botulínica se tiene menos tendencia a contraer la musculatura, por lo que la atenuación de las arrugas se mantiene parcialmente.
En algunos casos de arrugas muy profundas, sería aconsejable combinar o completar el tratamiento con procedimientos de relleno y peelings.
HIPERHIDROSIS
Este procedimiento es también uno de los más útiles en el tratamiento de la hiperhidrosis (sudoración excesiva), a nivel de las axilas, palmas de las manos y plantas de los pies, que afecta seriamente a la vida social del paciente, pudiendo afectar su autoestima.
El mecanismo de acción de la toxina a este nivel, consiste en la denervación química de los receptores de las terminaciones nerviosas simpáticas en las glándulas sudoríparas.
La aplicación es similar al procedimiento antes descrito, haciendo un poco mas de énfasis en la preparación de la anestesia local. Una vez concluida la aplicación de la toxina en las áreas de las palmas de las manos, se recomienda al paciente evitar conducir y manipular objetos que necesiten de fuerza en las manos, pues podría verse afectada la capacidad de prensión durante un tiempo.