Dime como duermes y te diré que arrugas tienes

Hace unos días, buscando como influía el descanso en la aparición de las arrugas y el envejecimiento cutáneo me encontré con un nuevo estudio (Sleep wrinkes: Facial Aging and Facial Distortion during sleeep) publicado en septiembre de 2016 en la revista Aesthetic Surgery Journal 

Este estudio revela que el dormir de lado o boca abajo incrementa las arrugas y el mantenimiento de estas más allá de las horas de descanso. 

Esto es debido a que:

• aumenta la compresión y la tensión de la piel en estas posturas
• movimiento horizontal de cizalla de la piel de la cara contra la almohada, 
• repetición cada noche de estos movimientos y 
• pérdida progresiva de la elasticidad de la piel con la edad 

Dando como resultado más cantidad de arrugas por centímetro cuadrado de piel y que estas sean más marcadas y profundas.

El Dr. Goesel Anson, el autor principal de este estudio y profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad de Nevada (EE.UU.), también destaca la influencia del tiempo que pasamos en cada postura: 

• mientras que cuando nos vamos a dormir podemos ser conscientes de la posición en la que deseamos permanecer acostados, 
• cuando nos dormimos cambiamos inconscientemente de posición. 

El número de cambios de posición al dormir está entre las 16 y las 27 cada noche, con una media de 20 cambios de posición.

Las posiciones más comunes al dormir son:

• 65% duerme de lado
• 30% decubito supino (echado sobre la espalda)
• 5% decubito prono (boca abajo)

Diferencia entre las arrugas de expresión y las arrugas producidas por la posición al dormir

Según la posición, algunos patrones de arrugas pueden reforzar las líneas de expresión ya existentes; pero la mayoría de las arrugas producidas por la posición al dormir son perpendiculares a las líneas de expresión: como ocurre en frente, labios y mejillas. 

Al contrario de lo que ocurre con las arrugas producidas por las líneas de expresión, estas arrugas perpendiculares desarrolladas durante las horas de sueño no pueden ser eliminadas con toxina botulínica, pues no tienen relación con la actividad del músculo facial subyacente, sino con la compresión mecánica de la piel, produciendo fracturas epiteliales visibles, que pueden tratarse con materiales de relleno.

Como tratamiento preventivo.El Dr. Anson recomienda usar en la medida de lo posible almohadas especiales (el autor habla de la JuvRest pillow, fabricada en EE.UU.) para permanecer dormido en decubito supino (echado sobre la espalda) durante el sueño, de tal manera que se pueda minimizar los movimentos de distorsión facial (compresión, tensión y cizalla). 

Respecto al tratamiento para eliminar o diminuir la profundidad y el número de arrugas producidas durante el sueño, la única alternativa que el Dr. Anson recomienda es el uso de materiales de relleno (como el ácido hialurónico y la hidroxiapatita cálcica), que producirían una mejora temporal.